domingo, 19 de octubre de 2008

Una mujer y lo que el viento se llevó





Una mujer, no muy simple por lo demás, buscó y encontró; Amor, pasión, entrega absoluta, ¡alma y cuerpos unidos!


Una mujer encontró al hombre de sus sueños, aquel, que había buscado bajo cada mirada y en el horizonte tantas veces.

Pero un día le perdió.

No vale la pena contar los por qué, causas, motivos, razones o circunstancias.

Y un día, caminando como bien gustaba hacerlo lo vió...

Y corrió hasta él, llena de emoción y alegría. Antes sus ojos veía lo que tanto había amado, lo que por tanto tiempo habia luchado por mantener con vida y lo que sentía muy suyo.

Pero él vestía de gris, como todos, compraba en una tiendas discos, reía con un par de amigos, miraba su reloj preocupado de la hora y habló (muy fuerte por cierto) de que debía llegar temprano a casa.

Mientras más veía y oía, más lentos se volvían sus pasos y de pronto ya no corría, sino, que caminaba.

Era su voz, su rostro, su cuerpo, sus ojos...pero ¿dónde estaba él?, aquel, que vestía de rojo y negro caminando en medio del gris imponiendo su voluntad...dónde estaba aquel...

El corazon se sintió impactado por un golpe fuerte, el aire se escapó del cuerpo, la sonrisa se volvió murmullo y la desazón voz. Entonces, como cuando ocurre con los previos a infartos el mundo se detuvo por un segundo y la vida pasó antes los ojos, dando a entender que no habia otra oportunidad de seguir buscando o esperando. Si la voluntad era el gris...

El rojo jamás sería del gris.

El viento se llevó la queja, el corazón volvió a latir (aunque más lento) pasó por el lado de él y éste lo notó

- ¿Esta bien usted, señorita? -
- Claro, no se preocupe -

Y el hombre gris se llevó sus discos a casa, mirando su reloj apurado mientras la mujer de rojo seguia su camino, triste, viva y con un claro aviso del corazón.



K de T.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo me he sentido alguna vez como esa mujer, yo soy la mujer de Rojo harta de los hombres de gris..
De verdad... quisiera secuestrarte para que pusieras voz a mi corazón, mis sentimientos y mis pensamientos ya que tan bien se te da hacerme sentir identificada con tus escritos. Un beso...