Aquello era tibio, si sabes.
Un minuto que invadió el alma,
rompió la fuerza y tocó la piel en silencio.
Que valen los ruidos callejeros intentando distraer,
la noche o el crujir de las paredes,
que significa ahora mismo el universo
o todas las ideas que conjuré siendo triste.
Para qué sirve realmente el olvido si aún es roja la sangre
o simplemente ¿la vida?,
si he dejado un hueco vacío donde tu estabas.
Es simple,
profundamente te he amado y profunda es la caída.
Yo te veo ahí, tras los espejuelos y notas cuando lloro,
Cuando río o cuando deseo.
Estás ahí, tras esos colores inventados por el suelo
y notas al matiz de la lágrima hecha ruego.
Alégrate por Dios, amor mío,
me desangro y duele,
¡Vivo! Aunque a veces creas que muero.
Es imposible no hundirse en el veneno de la amarga distancia,
si te amo como nadie sabe que amo,
si te extraño como nadie supo describir lo que era retorcerse
en amargos desvelos,
sí tantas cosas, si todo es tan increíblemente cierto.
Me alejo de ese que es nuestro lecho, o me arrastro,
sepa Dios como encontré consuelo.
Alégrate amor mío, ¡alégrate!,
Te amo como nadie sabe que he amado ,
Y te siento, como ningún mortal sabe sentir cuando se siente al recuerdo.
Un minuto que invadió el alma,
rompió la fuerza y tocó la piel en silencio.
Que valen los ruidos callejeros intentando distraer,
la noche o el crujir de las paredes,
que significa ahora mismo el universo
o todas las ideas que conjuré siendo triste.
Para qué sirve realmente el olvido si aún es roja la sangre
o simplemente ¿la vida?,
si he dejado un hueco vacío donde tu estabas.
Es simple,
profundamente te he amado y profunda es la caída.
Yo te veo ahí, tras los espejuelos y notas cuando lloro,
Cuando río o cuando deseo.
Estás ahí, tras esos colores inventados por el suelo
y notas al matiz de la lágrima hecha ruego.
Alégrate por Dios, amor mío,
me desangro y duele,
¡Vivo! Aunque a veces creas que muero.
Es imposible no hundirse en el veneno de la amarga distancia,
si te amo como nadie sabe que amo,
si te extraño como nadie supo describir lo que era retorcerse
en amargos desvelos,
sí tantas cosas, si todo es tan increíblemente cierto.
Me alejo de ese que es nuestro lecho, o me arrastro,
sepa Dios como encontré consuelo.
Alégrate amor mío, ¡alégrate!,
Te amo como nadie sabe que he amado ,
Y te siento, como ningún mortal sabe sentir cuando se siente al recuerdo.
3 comentarios:
Es increible la forma en que puedes convertir un instante de noche en tan apreciable poema, y para mi, particularmente, con esperanza, aun cuando el momento sea de tan profunda tristeza.
Siempre que te veo a los ojos encuentro la razon por la cual hoy siento vivo al corazon, y cuando veo tu boca... tu boca... un recuerdo, y he ahi la razon para no perder la alegria.
Gracias por escribir... recuerda, siempre...
"estoy aqui para quererte, para adorarte, para decirte... amor, amor..."
Un placer leerte, no hace falta que te diga lo bien que escribes.
Aunque es una pena que escribas de tan profunda tristeza aunque muchas veces escribir lo que uno siente sirve de reflexion y deshaogo. Tambien es una manera de expresar lo que a veces no podemos decir con palabras delante de una persona por lo mucho que duele pronunciarlas.
Un saludo ;)
Mi querida Rose, me asombras cada vez que te leo...
Me debes un mail!
Saludos, espero que estés bien.
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