lunes, 23 de julio de 2007

El camino fácil


Hay cosas de las que no me arrepiento y he pensado en hacer muchas otras las cuales posteriormente medito y logro descubrir que van en contra de como soy y sin embargo no me importa.

Hay veces en las que actúo friamente (aunque sea dificil de creer para quienes me conocen), otras en las que las penas ajenas más que causarme tristeza me ocasionan disguto y he llegado a la conclusión que no es aquel disgusto en contra de aquellas personas, sino, el hecho de que tomen el camino fácil.

Siempre he creido que llorar y quedarse en un rincón solo, triste y abandonado es una alternativa agradable y al final, comprensible. Siempre habrá un alma caritativa que ha de llegar en auxilio, siempre, porque hasta para el más desafortunado o maldito hay una segunda oportunidad.

Cuando veo a estas personas me pregunto ¿que harían con lo que yo se y siento?, ¿qué harían con el constante perseguir de los enemigos implacables y de las falsos amigos? ¿o cómo podrían sobrellevar la idea de caminar en solitario una y otra vez, aceptando el destino que margina de una sociedad a la cual jamás has pertenecido ni pertenecerás?

Supongo que entonces, la raza humana se extinguría o en su efecto contrario, solo sobrevivirian unos pocos.

El camino fácil no es otro que el que condicionamos para sentirnos mejor.

Hay situaciones que requieren de fuerza, valor y concecuencia o simplemente, desición.

Siempre lo he dicho, ir hacia arriba es más dificil que dejarse caer cómodamente hacia abajo.

Leí hace unos días un texto dónde alguien mencionaba que si se enfrentaba a Dios acabaría con él por las injusticias que habían en el mundo, y un poco antes, hacia mención a que no le importaba el sufrimiento colectivo y de la raza humana.

Es más fácil decir "no me importa" y luego buscar un culpable por las cosas que de algunas forma nos afectan más que al resto de las personas y decir que no sentimos nada.

Lo repito y afirmo: el camino hacia aceptarse a uno mismo es el más dificl de todos y más el camino del dolor, es solo para Guerreros y valientes, por tanto, tambien creo que hay muchos muertos que no tuvieron la fuerza de estar vivos y muchos vivos, que aunque pelean a diario a veces quisieran estar muertos.

Eso me recordó a mi jardín de rosas en el infierno, aunque el día que acepte quién era y mi destino inicié el camino de regreso, un camino que me llevaria lejos del acantilado donde, en silencio, observaba las desgracias humanas y la de los mios.

Pero es un camino dificil de recorrer, un camino que la muerte, mi peor enemigo me hará dificil de recorrer y unos días despues de mis 28 siglos dió su primera estocada la cual logré aceptar y vencer más rapido de lo que yo esperaba. Sin embargo, extraño el tibio aire que traía hasta mi el aroma muerto de mis rosas, caminar junto a ellas y sentir como me herían cada una de sus espinas, el intoxicante y majestuoso momento en el que vencí a cada uno de mis insufribles enemigos.

Tal vez, y solo tal vez yo tomé el camino fácil en el que sufria y morir a causa de mis profundas heridas, en el que permití que la muerte se hiciara dueña de mi destino y donde el infierno me recordaba una y otra vez el amor que habia perdido.

Al final, el valor de los seres humanos e inclusive de aquellos que son como yo no está en pasar de los sentimientos y los deseos que llenan el corazón, sino, de ser capaces de enfrentarlos. De creer que por amar, desear, soñar, reir, perdonar y comprender no nos hace más debiles que el resto, sino, más completos y un poco más cerca de cerrar los eternos circulos que nos atrapan una vida tras otra.

Por eso, tengo una rosa del jardin del infierno en mi cabello y firme llevo mi espada de camino a los mios y a mi destino; Me alegro profundamente de estar viva para los mios y mi tierra.

Y, lamento profundamente haber perdido a un ser intensamente amado en la oscuridad de la muerte y el deshonor.

Seguiré según mi deseo, cometido y promesa iluminando el sendero de los caballeros dragones y más aún el de él que es tan especial para mi.

Por que esa es mi promesa y cometido, mi elección, es el camino dificil.


K de T.

1 comentario:

Anónimo dijo...
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