Soy, lo que ves.Más allá de mi, en lo que es mi interior
está mi deseo.
Sí, cómo te deseo...
Deseo tus ojos y locura, tu boca húmeda de mirarme
Tu risa escondida, tus manos acariciando mi piel
siento...
presiento el tacto de tus más íntimos deseos,
los míos, en mi...adentro.
¡Ah!, Felicidad!
Tracicionera y maldita
esquiva y peligrosa
¡cómo te deleitas con mis lágrimas!
Mi cuerpo, que estaba tan cálidamente desnudo
se vistió de espinas rojas...
Soy yo, la que desea. La que te ama, la que percevera
la que guía a tus ojos en la oscuridad y sabe enredarte en sangre
en deseo...en el alma mía.
Mis labios repasan los tuyos, los besan, los intimidan
y no lo notas,
mis manos que te recorren y toman el sudor de lo que no dices
y lo guardan en mi memoria para los sueños
donde te siento en mi, sobre mi; para ti.
¡Ahhhh! soy el consuelo de las horas, la belleza roja...
El amor impregnado en la piel que huele a rosas,
solo, y solo cuando nos tocamos
las rosas vuelven a ser rojas...
mi cuerpo, mi vida, es hermosa.
Toca mis espinas, son el amor
esto soy yo, la pasión....
el consuelo de la vida que nos queda...la belleza roja.
Kitshia
3 comentarios:
*APLAUSOS*
Si pudiera calificarte el poema... ¡ganabas el nobel de literatura de los próximos cien años!
Me quito el sombrero, ¡te superas, Rose!
*HACE UNA REVERENCIA*
¡Vaya! en serio que pones a pensar a uno... es de lo mejor que he podido leer en la vida, hast creo que deberían dedicarte uno, teme mereces una estatua, en serio
que via decir que no hayan dicho ya...
ole ahi la pasion :P
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