lunes, 26 de febrero de 2007

Condena.



Esta noche, despues de tantas otras en calma, ha dejado de ser perfecta.

He visto las cosas de lo que es, de lo que será y mi alma se ha retorcido en el infierno. YO, que pensaba que nada me haría ser frágil he terminado de rodillas ante su imagen débil, disuelta, sola...y desangrada.

Necesito morir de verdad; Necesito olvidar la luz que me atormenta...que no me deja entrar en la más perfecta oscuridad para encontrar a ese enemigo que me amenaza, me atormenta con las cosas que son y serán.

Mi armadura tiene demasiados golpes y por alguna de las hendiduras, si miras bien, puedes verme sangrando.

Y ahi estabas, como siempre al final de las cosas, y como siempre yo; destrozada. En llanto y mesura, en odio y dolor, en venganza...

¿Por qué tú? porque no otro, tengo a muchos hermanos a los cuales protego como a ti y sin embargo es tu imagen destruida y agonizante la que me derrota sin contemplaciones.

...Y ahi estabas, entre mis brazos, perdiendo la existencia. Y tu sangre en mi, y tú que vistes mi negra armadura del tibio rojo que en escencia llena mis sentidos. Y la lágrima, ESA lágrima que creí escondida emergió de quién sabe dónde (pues no tengo corazón) para cubrir tu rostro, para dejarme ver tus ojos...para pedirte no me protejas más.

No escuchas y sonries, dices que ahora vives y te sujeto fuerte, emito palabras sin sentido tratando de retenerte...beso tus labios buscando dar calor...dar vida.

Y todo concluye como siempre, a pesar del tiempo que ha pasado seguimos pisando el mismo camino; nada ha cambiado y el enemigo me muestra el dolor de la verdad ¿o mentira?

Una y otra vez la imágen, tú en mi lugar...tú y esa estúpida idea machista de protegerme ¿para qué? no es necesario! no lo era.

Las cosas no cambian, nada cambia...y el destino irreparablemente se hará presente otra vez para llevarnos al pricipio del círculo, de ese a veces a mada y odiado círculo.


K. de T.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Suena...(¿suena?)se lee fuerte...

Es verdad, no se peude olvidar cuando cae alguien para defender a quien aprecia; pero puede ser que no fuese por machismo que se sacrificó, sino por su propio aprecio hacia tu persona...

te felicito por este y otros textos tan bellos en tu archivo!